Cuando Álex y Blue eran niños jugaban a perseguirse con espadas de madera. Él era el rey, ella, su guerrera. Con los años, sustituyen las armas por escapadas para bañarse juntos en el río, y pronto Álex encuentra el camino para colarse en la habitación de Blue por las noches.
El primer beso nunca se olvida, y el de Blue vino con una promesa en una calurosa noche de verano.
Álex cogerá un avión que lo llevará a Harvard. Blue buscará su propio camino en Edimburgo. No obstante, el fuego del primer amor sigue crepitando… ¿Será suficiente distancia un océano para mantenerlos separados? ¿Cómo se puede olvidar cuando la piel guarda memoria?
Una promesa rota, secretos, dos hermanos y un amigo como tercero en discordia, mientras el mundo no deja de girar. ¿Conseguirán Álex y Blue tener su mañana?