¡Hola, romántic@s! ¿Cómo lo estáis llevando? ¡Espero que genial! Hoy toca compartir con vosotros mi opinión sobre Palabras que burbujean como un refresco, una película de animación japonesa romántica muy muy bonita que podéis ver en Netflix. ¿Os animáis a leer la entrada entera? ¡Vamos a ello!
Índice
Sinopsis de Palabras que burbujean como un refresco
Tras conocerse en un día soleado, un chico tímido que se comunica con haikus y una chica alegre pero insegura disfrutan de un breve y mágico verano juntos. (FILMAFFINITY)
Opinión Personal de Palabras que burbujean como un refresco
Al ver el tráiler de Palabras que burbujean como un refresco supe que me iba a encantar. ¡Y no me equivocaba! La película está llena de dulzura, ternura, amistad, romanticismo y valores muy importantes que a veces olvidamos con facilidad. Palabras que burbujean como un refresco nos presenta a Smile, una joven súper extrovertida y amable que sube videos a las redes de su día a día; y a Cherry, un chico muy tímido, pero adorable y empático.
Aunque Smile es una chica súper alegre, tiene muchas inseguridades, la autoestima baja, poca confianza en sí misma y bastante prejuicios con su dentadura. Cherry es adorable y empático, pero le cuesta muchísimo entablar conversación con la gente y habitualmente huye de ella porque no confía. Además, Cherry intenta escribir haikus, que es un tipo de poesía japonesa que consiste en un poema breve de diecisiete sílabas.
Los dos se conocerán de forma accidentada, pero a partir de ahí Cherry y Smile romperán poco a poco sus barreras personales para conocerse y abrir su corazón. Palabras que burbujean como un refresco nos enseña, por ejemplo, que una persona en apariencia introvertida y poco habladora puede guardar grandes sentimientos, emociones y pensamientos sobre la vida, como es el caso de Cherry.
Y que quizás, una chica que en principio tiene un montón de popularidad en las redes sociales, puede tener muchísimos complejos sobre sí misma que le impiden avanzar en su camino y tener una autoestima equilibrada. Uno de los mensajes que nos deja la película es que no debemos juzgar a nadie, ni mucho menos criticar por criticar sin conocer las situaciones ni los problemas de cada uno.
Palabras que burbujean como un refresco tiene una animación preciosa y muy cuidada. La película es muy agradable de ver desde el minuto uno, y enseguida empiezas a empatizar con los protagonistas. Enseguida coges muchísimo cariño a Cherry y a Smile porque son súper encantadores y tiernos. Tiene momentos románticos y adorables, pero no es la típica película japonesa de romance. Como os decía antes, transmite un montón de valores y detalles valiosos.
Tengo que reconocer que el final (no os voy a hacer ningún spoiler) me llegó al corazón y me hizo soltar alguna lagrimilla porque es absolutamente bonito y expresivo. Seguramente, Palabras que burbujean como un refresco se convierta en mi película japonesa de animación preferida, pero tenéis que verla para que sepáis a lo que me refiero. ¡Ah! Si en casa tenéis a adolescentes… ¡os animo muchísimo a verla con ellos!
¿Por qué os digo esto? Porque la película es súper educativa y puede ser muy empática para los adolescentes. Quizás se vean reflejados en alguno de los personajes de Palabras que burbujean como un refresco. Además, da una oportunidad muy buena para hablar de los complejos, de la autoestima, de las inseguridades, de los valores, de respetar a los demás, de no juzgar a nadie…
¡Ya me contaréis si os lanzáis a verla! ¡Nos leemos en los comentarios y por las redes sociales! Y por supuesto… ¡hasta la próxima entrada!
RECOMENDACIÓN EXTRA: Tratamiento real
