¡Hola, romántic@s! ¿Cómo lo estáis llevando? ¡Espero que genial! 🙂 Hoy os comparto la reseña de Ambar: la mirada del deseo de la fantástica escritora Tricia Ross. ¿Os animáis a descubrir mi opinión sobre esta novela romántica-erótica? ¡Vamos a por la entrada del viernes!
Sinopsis
LA EXPOSICIÓN ERA UNA DECEPCIÓN… HASTA QUE SUS OJOS SE CRUZARON CON LA PROFUNDA MIRADA COLOR ÁMBAR DE UNA HERMOSA MUJER PLASMADA EN UN LIENZO. Adrien Lindström es rico, inteligente y atractivo, el tipo de hombre que no parece tener problemas para encontrar mujeres, sin embargo cuando conoce a Julia comprende que ella es distinta de todas las que ha conocido.
Opinión personal Ambar: la mirada del deseo
Con esa sinopsis… ¿quién no caería en la tentación de leer la novela? Yo tuve la suerte de hacerlo en una lectura conjunta. Ámbar: la mirada del deseo es una historia intensa, romántica, erótica y de suspense. Una historia que ha hecho que me mordiera las uñas de lo nerviosa que estaba y suspirar sonriendo por los maravillosos momentos de Adrien y Julia.
En un primer momento, se puede pensar de Adrien que es el típico hombre rico, arrogante, caprichoso y conquistador pero nada más lejos de la realidad. Según van pasando las páginas, nos damos cuenta de que el empresario sueco es sensible, protector y con un montón de miedos e inseguridades a sus espaldas.
Adrien siempre ha ido de flor en flor. No ha tenido problemas para relacionarse con mujeres y ellas nunca han rechazado pasar una noche con él. Él no quería enamorarse. Hasta que ve por primera vez a Julia, una mujer que desde el primer momento hizo que le latiera más deprisa el corazón. Con ella, haría las cosas diferentes. Ella no era como las demás.
Julia es una mujer independiente, orgullosa y que no se ha implicado mucho con sus parejas. Todavía no ha llegado a sentir ese cosquilleo, ese deseo, esa pasión y esas «mariposas en el estómago» de cuando estás enamorada. Lo más importante para ella es el arte. Hasta que conoce a Adrien, un empresario sueco que pondrá su mundo al revés.
Julia y Adrien deciden arriesgarse, deciden apostarlo todo por la pasión, el deseo y el amor que sienten. Son conscientes de conexión y la necesidad tan fuerte que existe entre ellos. Por fin Julia siente esas «mariposas en el estómago» y Adrien se entrega totalmente a ella. Pero todo empezará a complicarse y la relación de ambos penderá de un fino hilo.
Intensidad, erotismo y emociones a flor de piel
¿Lograrán superar juntos todos los obstáculos? Para eso tendréis que leer la novela.
Tricia Ross nos regala una maravillosa novela llena de intensidad, erotismo, romanticismo y suspense que a mí personalmente me ha tenido enganchada desde el primer momento. Cada página que lees eres consciente de la evolución de los personajes, de cómo cambian, de sus dudas, de sus miedos… y eso es increíblemente genial.
La autora ha conseguido de sobra que me meta de lleno en la historia, he desfrutado al máximo con cada diálogo, con cada encuentro de Adrien y Julia, les he querido «mandar a tomar viento fresco» a los dos, me he emocionado y he insultado en voz alta a cierto personaje que he odiado desde el minuto uno (no doy más pistas. ¡A leer se ha dicho!).
Sinceramente, no me ha sorprendido que la novela me haya gustado tantísimo. La primera que leí de ella, Al final del camino, me emocionó y me encantó desde la primera línea. Si estáis buscando historias que os roben el corazón y os hagan soltar más de cien suspiros… os animo a leer las dos.
Además, muy pronto saldrá la segunda parte de Ámbar: la mirada del deseo. ¿De verdad os vais a perder a Adrien y a Julia? Podéis comprarla en Amazon aquí. ¿A qué estáis esperando?
¡Hola!
No hay nada como un libro que te robe el corazón y que encima tenga unos personajes que evolucionen, pero a mi esta novela no termina de llamarme la atención por lo que mencionas de que a Adrien le late más rápido el corazón cuando ve a Julia por primera vez. Eso me lleva a pensar en instalove y muy pocas veces me suele gustar xD. Sin embargo, he leído tu reseña de «El final del camino» y ese libro sí que me ha gustado mucho más, así que me lo llevo anotado para leerlo próximamente.
¡Besos!